Se acerca un puente, el del 12 de octubre, Fiesta Nacional en España al celebrarse el Día de la Hispanidad. Y seguro que más de uno de nosotros estamos haciendo planes para pasar unos días de ocio y descanso en pareja, con amigos o con toda la familia lejos de nuestro hábitat habitual, tratando de olvidar en ese tiempo la rutina y el estrés diario.

Una magnífica alternativa para que el viaje nos resulte del todo inolvidable es visitar el Parque Natural de Aracena y Picos de Aroche y aprovechar para alojarnos en un hotel de cuatro estrellas con encanto. ¿A qué suena todo bastante bien?

Hablar de Huelva nos lleva a pensar siempre en sus playas y en esos atardeceres frente al mar. Pero esta provincia es mucho más que agua salada y arena blanca. Su parte norte, cercana a Extremadura, pasa por ser uno de los espacios serranos más interesantes de España.

Su paisaje está presidido por amplias dehesas donde crecen alcornoques, encinas y castaños y por bosques de ribera que acompañan el transitar de los numerosos cursos de agua que recorren la comarca.

Y todo ello salpicado de pueblos de casas blancas y calles empedradas donde, a buen seguro, seremos recibidos con los brazos abiertos. La capital es Aracena, nuestro campamento base donde disfrutaremos de un alojamiento rural con spa.

Hay para todos los gustos. A quien le gusta pasear o montar en bicicleta cuenta con un buen número de senderos bien señalizados que recorren el Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche, que forma parte de las últimas estribaciones de Sierra Morena en su parte más occidental.

Siendo otoño podemos aprovechar, además, para recoger algunas setas (muy numerosas en la zona) o, si tenemos suerte y salimos al campo al amanecer o no regresamos a nuestro hotel para toda la familia en Aracena hasta que casi haya anochecido, emocionarnos con los sonidos de la Berrea, ese momento en que los ciervos en celo muestran todo su poderío en una lucha por aparearse con las hembras.

Para aquellos que siempre quisieron seguir los pasos de Julio Verne y viajar al centro de la Tierra, no hay nada más parecido que adentrarse en la conocida como Gruta de las Maravillas, lugar que cuenta con el honor de haber sido la primera cueva turística de España. Su interior está repleto de sorprendentes formaciones rocosas que se han ido esculpiendo a lo largo de los siglos por el efecto del agua sobre la piedra caliza.

Otra alternativa es visitar alguno de los singulares museos que hay en la localidad, muy cerca de nuestro hotel con el encanto de un convento del siglo XVII. Uno nos hará la ‘boca agua’. Es el Museo del Jamón, donde aprenderemos todo lo referente a uno de los habitantes más ilustres de esta comarca de la sierra de Huelva, el cerdo ibérico. El otro, el Museo de Arte Contemporáneo de Andalucía, es el único de estas características en la región que se encuentra al aire libre.

Desde nuestro hotel de cuatro estrellas en Aracena podemos contemplar nuestro próximo destino: el castillo. Una fortaleza medieval que desde lo alto del cerro ‘vigila’ desde hace siglos el deambular de los aracenenses y que formó parte en su día de la conocida como Banda Gallega, conjunto de fortificaciones construidas para defender el reino de Sevilla de los ataques de las tropas de Portugal y de las Órdenes Militares asentadas en el sur de Extremadura. Y junto a él, la iglesia prioral de Nuestra Señora del Mayor Dolor, el templo más antiguo y emblemático de la localidad y que está considerada Bien de Interés Cultural.

Y ya que estamos, aprovechemos para degustar una gastronomía que aúna tradición y modernidad y que está basada en los productos de la zona, con el cerdo ibérico como gran estandarte. Pero la sierra también es rica en hortalizas, verduras y frutas. Y en otoño en setas y castañas. Esta última muy utilizada en la deliciosa repostería de la zona, en platos como el potaje de castañas o las castañas en licor. Pero también destacan la compota de manzana, el membrillo, los orejones, las poleás…